OFICINAS DE ESTILO INDUSTRIAL. DECORACIÓN Y MOBILIARIO.

Nos trasladamos a esos lofts de la ciudad de Nueva York que tantas veces hemos visto en las películas. Esos locales de aspecto industrial, diáfanos, amplios y luminosos que triunfaron en los años 80. Pues bien, ahora se trata de llevar esa estética a una oficina. Así, daremos con las oficinas de estilo industrial.

Hoy en día, son muchas las empresas que han apostado por diseñar oficinas de estilo industrial. Y no solo en Nueva York. Se trata de locales abiertos y radiantes que benefician claramente la imagen de la empresa. Transmiten una sensación de oficina actual, dinámica y original. Sin duda alguna, la estética vanguardista de las oficinas de estilo industrial es tremendamente atractiva. Además, y esto es importante recordarlo,  son cómodas y prácticas para trabajar. Los empleados se desenvuelven en un entorno sobrio, elegante y muy funcional.

En DESMON, hemos equipado muchos locales con muebles de oficina de estilo industrial. Conocemos los trazos básicos de este tipo de decoración y qué mobiliario debe emplearse. Con este artículo queremos ofrecerte una guía donde encontrarás los rasgos fundamentales para el diseño de oficinas de estilo industrial. Entremos en materia.

El particular y atractivo diseño industrial requiere de ciertos factores básicos. Tal vez, el más importante sea contar con un local amplio y con pocos obstáculos. De hecho, el origen de este diseño de oficinas hay que buscarlo en la evolución de la factoría hacia la oficina. Eso significa que, originalmente, estos espacios eran fábricas donde se producían artículos manufacturados. Solían contar con maquinaria pesada que necesitaba espacio para funcionar. Puesto que se trataba de una zona de fabricación, no se empleaban recursos en rebozar paredes o tapar vigas.

Muchas de esas factorías cesaron su actividad y se quedaron vacías de máquinas y empleados. Sin embargo, durante los años 80 del siglo XX se empezó a transformar esas viejas naves en oficinas con una estética sobria y  elegante y que sigue sin pasar de moda. El estilo industrial se ha ido afianzando y hoy en día existen empresas que disponen de instalaciones que ocupan las páginas centrales de las revistas de decoración.

Estas son algunas de las características propias de las oficinas de estilo industrial.

Sin duda alguna, en las oficinas de estilo industrial, el espacio es el auténtico protagonista. Son oficinas abiertas que cuentan con pocas divisiones. Cuando es necesario, acotar un espacio para tareas que requieran más concentración o privacidad, se instalan tabiques móviles transparentes. Se trata de paredes de quita y pon que pueden desplegarse en segundos. Esas paredes de cristal potencian la luminosidad del local y encajan perfectamente con el estilo.

Las paredes son uno de los elementos más identificativos de las oficinas de estilo industrial. La razón es que no se ocultan ni se rebozan. Es decir, se deja a la vista el ladrillo o el hormigón. Eso le aporta un estilo de factoría indispensable en este tipo de decoración. En algunos casos, cuando no se dispone de ese tipo de pared primaria, se colocan papeles o vinilos que imitan muy bien el original.

De igual manera, las vigas de acero o de madera también se dejan a la vista. De hecho, suponen un elemento decorativo muy atractivo en el diseño industrial. Se trata de estructuras sólidas y firmes cuya visión potencia la imagen solvente de la empresa.

Las tuberías de agua o de gas tampoco se ocultan. El color del cobre es uno de los básicos en el diseño industrial pero también es posible pintar esas canalizaciones. Eso sí, siempre con colores neutros. El blanco, el gris, el marrón y los tonos metalizados son los reyes del diseño de oficinas de estilo industrial.

Los amplios ventanales son muy propios de la decoración de oficinas con estilo industrial. Además, resultan muy útiles porque proporcionan una gran cantidad de luz natural. Los colores neutros de la decoración multiplicarán la luminosidad del espacio. Los marcos de las ventanas deben ser metálicos y de color negro o marrón oscuro. En algunas zonas, será inevitable colocar alguna cortina o estor que permita filtrar algo de la luz que entre en la oficina.

Las piezas de mobiliario son un componente fundamental para conseguir oficinas de estilo industrial. Antes de nada, conviene señalar que el binomio metal / cristal será muy habitual mesas y estanterías. Por otro lado, la madera vista y la envejecida contribuirán a aumentar ese objetivo de aspecto industrial.

Mesas. Normalmente se apuesta por mesas con estructura metálica negra o de acabado pulido en patas y soporte. Respecto al tablero, puede ser de cristal o de madera envejecida. El grosor también suele ser importante.

Sillas. De aspecto moderno y combinando el cuero negro con las partes metálicas. Lo ideal es que sean sillas ergonómicas para los trabajadores. En las zonas de descanso se pueden utilizar sofás o butacas también de cuero.

Estanterías. Sin duda alguna, las estanterías deben ser metálicas o de madera envejecida. Los estantes deben tener cierto grosor para transmitir una sensación de solidez. En este tipo de oficinas abiertas, las estanterías también pueden utilizarse para delimitar espacios sin necesidad de levantar paredes.

Taquillas. Las taquillas metálicas son indispensables en las oficinas de estilo industrial. Suponen una zona para que los trabajadores puedan dejar sus pertenencias y contribuyen al carácter  fabril de las instalaciones.

Es importante recordar que el color negro, el blanco y el marrón en distintos tonos son los predominantes en el mobiliario para oficinas de diseño industrial. Esos colores se equilibran entre sí y mantienen la sobriedad del diseño.

En el momento de pensar los objetos decorativos de una oficina de estilo industrial hay que desterrar la idea de uniformidad. Esa continuidad ya la aportan los colores neutros empleados en el mobiliario. También, la presencia constante de metal y cristal aporta una línea de diseño que nunca pasa de moda. Por esa razón, se puede aportar un punto discordante colocando objetos recuperados o mezclando piezas de estilo diferente. En ese caso, las zonas de descanso son el mejor lugar para atreverse.

En cuanto a los objetos decorativos se pueden colocar esculturas metálicas abstractas y poco ostentosas. También, los objetos de piedra encajan muy bien en el diseño industrial. Otra opción interesante es integrar objetos antiguos que presenten un buen aspecto. Si están relacionados con la actividad industrial, mucho mejor. Por ejemplo, cajas de herramientas antiguas, palés, máquinas de escribir o relojes de pared. Una vez más, se apuesta por combinar el metal con la madera.

Por último, este tipo las oficinas de estilo industrial reciben muy bien propuestas decorativas de estilo nórdico. La razón es que se ajustan a la sobriedad y la elegancia de un entorno con el atractivo de la sencillez.

Como ya hemos apuntado las oficinas de estilo industrial tienen un valor estético muy elevado. Son lugares amplios, luminosos y acogedores. Combinan los materiales fríos como el metal con la nobleza tibia de la madera. En DESMON, hemos equipado este tipo de oficinas con el mejor mobiliario en bastantes ocasiones.

Nuestro equipo de diseño se ha ocupado de conseguir un proyecto original que favorezca la imagen de la empresa. Y al mismo tiempo, hemos obtenido un espacio práctico y funcional para desarrollar un trabajo con alto índice de productividad.

En DESMON somos especialistas en ofrecer soluciones personalizadas. Trabajamos para extraer un rendimiento óptimo del espacio disponible. Ofrecemos mobiliario moderno, saludable y de alta calidad. De igual forma, contamos con un equipo multidisciplinar que se ocupa del diseño, la fabricación y el montaje de todas nuestras piezas.

Si necesitas asesoramiento ponte en manos de profesionales. Contacta con nosotros y te ofreceremos un presupuesto a medida.