COCINA EN LA OFICINA. VENTAJAS Y DISEÑOS

Disponer de una cocina en la oficina ya es algo habitual en muchas empresas. En los años 90 del siglo pasado eran muy pocas las corporaciones que incluían estos equipamientos en sus instalaciones. Sin embargo, hoy en día, son muchos los centros de trabajo que incluyen esta zona.

Los estadounidenses fueron pioneros en el uso de la cocina office para oficina y la tendencia se extendió por Europa unos años después. Los nórdicos se apresuraron a incluirla y poco a poco se extendió por todo el continente.

Hace unos años, en España, muchos empresarios lo consideraban un gasto extra y sin recorrido. Sin embargo, esa mentalidad ha ido cambiado cuando las ventajas de disponer de cocina en la oficina han quedado patentes.

En DESMON, somos expertos en mobiliario de oficina y tenemos experiencia en el diseño, fabricación y montaje de cocinas para oficinas. Con este artículo queremos darte las claves sobre el equipamiento imprescindible y también hablarte sobre las ventajas que comporta esta estancia.

Ciertamente, la ubicación de un espacio de cocina en una oficina tiene múltiples beneficios. Estos son algunos de ellos.

• Aumento de la productividad. Contar con una cocina en la oficina evita que los empleados tengan que salir al exterior para almorzar o tomar un café. Sencillamente, pueden a acudir al espacio de cocina para comer o merendar. De esa manera, se evitan pérdidas de tiempo en desplazamientos y también la dispersión de los trabajadores en locales de la zona.
• Optimización de los tiempos. Normalmente, el empleado suele tardar entre media hora y 45 minutos en comer. Así, puede adelantar su jornada laboral, salir más temprano y conciliar su vida laboral con la familiar.
• Fomento del ahorro del trabajador. Hay muchos empleados que se llevan la comida preparada a la oficina para almorzar en la empresa. Eso supone que el trabajador no gasta dinero diariamente para pagar un menú de mediodía y por tanto ahorra dinero.
• Alimentación más sana. Todo el mundo está de acuerdo en que la comida cocinada en casa sabe mucho mejor. Pero es que además, suele ser mucho más sana. Los empleados pueden apostar por menús más saludables, caseros y libres de grasa y ultraprocesados.
• Socialización con los compañeros y superiores. El rato que se pasa en la cocina de la oficina sirve, además de para alimentarse, para reforzar el contacto con los compañeros. Se habla, se comparte, se comenta y la cercanía entre compañeros es más estrecha.
• Mesas para trabajar. Con la habilitación de un espacio de cocina en la oficina, los empleados pueden calentar los alimentos y sentarse a comer en las mesas de la zona de descanso. De esa manera, se evita que coman en el mismo escritorio donde trabajan.

A la hora de planificar la distribución de un centro de trabajo conviene destinar algún espacio para la ubicación de una cocina en la oficina. Para empezar, se debe tener en cuenta la cantidad de personas que forman la plantilla de la empresa y qué porcentaje suele quedarse a comer en la oficina.

Esa información permitirá habilitar un espacio con los metros cuadrados suficientes para acoger a los usuarios. Es importante desterrar esa idea de que cualquier rincón vale si se coloca un microondas. Eso es un error porque no será un espacio cómodo ni higiénico y los empleados no estarán a gusto. Al final, nadie usará esa zona y las personas que quieran comer en la oficina acabarán haciéndolo en su mesa de trabajo.

Así pues, en primer lugar, hay que buscar y habilitar un espacio amplio, con suficiente iluminación y, si puede ser, ventilado. A partir de ahí, podemos hablar del equipamiento que debe incluir.

Se puede apostar por un mueble modular que incluya armarios, estantes, cajones y encimera. De esa manera, habrá espacio para moverse con comodidad y los empleados podrán guardar sus fiambreras y otros envases de comida.

La decoración de la zona debe adaptarse a la de toda la oficina y se pueden incluir motivos relativos a la comida, el café o el descanso. También es importante que los muebles sean fáciles de limpiar porque es una zona que requiere un alto nivel de higiene. En ese sentido, se puede apostar por construir el mobiliario con material fenólico que es antibacteriano.

Sin duda alguna, la cocina en la oficina debe incluir mesas y sillas para que los empleados puedan sentarse a comer. Otra opción es apostar por la colocación de barras y taburetes altos muy habituales en modelos de cocina-office.

Por último, las piezas de mobiliario y el revestimiento de la encimera deben ser resistentes y duraderos. Una buena opción son los acabados en melamina: resisten impactos, calor y humedad y resulta muy decorativa.

Está claro que los electrodomésticos son imprescindibles en las cocinas de oficinas. En primer lugar, conviene colocar el horno microondas. En función del número de empleados, será aconsejable instalar más de uno para evitar colas.

La nevera también es indispensable. Debe tener buen tamaño y es imperativo que siempre esté limpia. Para mantener esa higiene es aconsejable establecer que un día a la semana se tirará a la basura todo lo que haya en el interior. De esa manera, se evita que ciertos alimentos acaben en mal estado y transmitan olores o parásitos.

También, es aconsejable incluir cafetera y hervidor de agua. El café y las infusiones pueden ser aportados por la empresa o por cada trabajador.

El fregadero es la última pieza básica para el buen funcionamiento de una cocina en la oficina. Es importante que los trabajadores se comprometan a mantenerlo limpio y evitar vertidos que puedan causar atascos en las tuberías.

Por último, debe ser un espacio con suficientes tomas de corriente para los electrodomésticos y la iluminación. Para ello, lo mejor es apostar por el suelo técnico elevado. Por un lado, es un pavimento resistente al tránsito diario de personas y, por otro, permite ocultar las tuberías y todo el cableado de la zona de la cocina.

En DESMON podemos ayudarte con la tarea de habilitar un espacio de cocina en la oficina o en el despacho. Nuestro equipo multidisciplinar se ocupará de diseñar un buen espacio, fabricar el mobiliario necesario y, por último, montar todas las piezas.

Somos expertos en ofrecer soluciones personalizadas y siempre trabajamos en contacto directo con el cliente. Empleamos materiales de alta calidad y siempre cumplimos los plazos de entrega. Si necesitas más información, ponte en contacto con nosotros y llévate un presupuesto a medida.